No buscaba nada raro, sólo alguien que me eche de menos aunque hayamos pasado todo un día juntos, alguien que se ponga nervioso al verme, que no se aburra de mis charlas aunque pasemos cinco horas al teléfono, que se alegre de escucharme. Alguien que me acompañe siempre a casa y haga divertido el camino, por más largo que sea; Alguien a quien pueda besar por un simple impulso sin sentirme atrevida. No me importan los regalos, las cenas ni las flores, mientras él demuestre admiración, me conformo con saber que conmigo es donde más le gustaria estar siempre. Y que conozca todas y cada una de mis sonrisas, alguien que elija quedarse conmigo aunque tenga otros planes, que sienta que antes de mí ninguna otra existió, que sus amigos se cansen de escuchar mi nombre. Que sienta que se le cae el mundo encima si discutimos y me abrace tirando su orgullo a la mierda, alguien que me haga reír hasta llorar, y me haga reír cuando no puedo dejar de llorar, que cada una de las canciones que escuche le recuerden a mí. Alguien que me haga sentir la chica más afortunada del mundo, sólo por el echo de tenerlo a él.
Ese texto le describe a la perfección u.u Así que no, no es nada raro, lo vas a encontrar porque yo te digo que ese tipo de chicos EXISTEN. :)
ResponderEliminarPrecioso :)
ResponderEliminarNo existen, los creas tú.
Yo he tenido ese tipo de relación porque la persona con la que estaba sacó esos aspectos que comentas y yo los potencié por necesidad; no soy (ni era) así con todo el mundo. Cuando la persona aparece, aparece, chiqui, y ahí es cuando todo confluye en una misma dirección.